Ya no peligra el pejerrey ni el calamar en la Playa Agua Dulce, en Chorrillos. Tras el enfrentamiento de trabajadores municipales contra los pescadores artesanales, hoy 24 de enero al fin vuelve la calma.
Muchos pescadores y comerciantes de productos marinos estaban indignados, ya que un parque acuático les quitaría más de 3 mil metros cuadrados. Afortunadamente, sus reclamos fueron escuchados y ahora se encuentran trabajando con normalidad.
Recordemos que el alcalde de Chorrillos, Fernando Velasco, mencionó que no permitiría que instalen el ‘Olaya Park’, pero en el caso de que otorgue el permiso, Juan Orbezo, miembro de la asociación José Olaya, señaló que no aceptarían cualquier beneficio o propuesta económica.