Detrás de la organización criminal “El tren de Aragua” se esconde la sanguinaria facción “Los hijos de Dios”, quienes siguen los mismos lineamientos de explotación sexual y extorsión.
Esta banda nació como consecuencia de la muerte de uno de los integrantes de “Los Gallegos”, por lo que todas las actividades son igual de nefastas.
Los integrantes de la banda criminal captaban a jovencitas a través de redes sociales e incluso, a través de convocatorias para “azafatas” de discotecas, pero al parecer eso no era suficiente.
Según el coronel Juan Montúfar, lo único que les importa a estos sanguinarios es hacer dinero, sin importar si exponen a otras personas o si las amenazan con la misma muerte.