A tener en cuenta. Esta mañana, el equipo de Arriba mi Gente visitó varios mercados de la capital con la intención de saber en qué situación se encuentran los alimentos. A causa del inclemente calor de verano, son muchos los productos propensos a una rápida descomposición, por lo que el consumo de los mismos podría ser perjudicial para la salud.
Los alimentos que más rápido se descomponen son el pescado y el pollo, muy consumidos entre las personas. Según la nutricionista Pierina Papadopulus, la gente está muy expuesta a todo tipo de enfermedades. “La población puede contagiarse de virus, alergias, parásitos o gastroenteritis. Estos alimentos deben estar congelados a menos de 20 grados centígrados, por lo que el calor podría afectarlos de forma severa y acelerar su descomposición”.
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