En San Isidro, un auto ha sido estacionado de forma incorrecta y ha estado en ese indebido lugar por más de cinco horas. Entonces llegarán dos serenazgos para imponer la multa respectiva.
De pronto llegará también el dueño del auto mal estacionado, quien reclamará de forma airada y le faltará el respeto a la autoridad edil. Debido a esto, el reportero hará las veces de instructor de defensa personal para que los serenos aprendan a hacerse respetar.
Sin embargo, las clases no harán efecto y el mal vecino nuevamente tratará de lo peor a los serenos. Afortunadamente, se hará presente el alcalde Francis Cabezonallison, quien tomará las medidas pertinentes para ‘bajarse’ al más faltoso de los vecinos de San Isidro.