Mario Sepúlveda, minero chileno que quedó atrapado en una mina en 2010, mandó fuerza y pidió oración para poder rescatar a los 12 niños.
El minero chileno, Mario Sepúlveda, uno de los 33 mineros que quedaron atrapados durante el derrumbe de la mina San José el pasado 5 de agosto de 2010, envió un mensaje de aliento a los 12 niños y su entrenador que quedaron atrapados en una red de cuevas subterráneas en Tailandia.
Los rescatistas seguían el jueves lejos de decidir cuándo y cómo sacar a los 12 integrantes de un equipo de fútbol infantil y a su entrenador de un complejo de cuevas inundado en el norte de Tailandia, donde fueron hallados esta semana tras nueve días perdidos bajo tierra.
La dramática operación de búsqueda y rescate de los chicos, que desaparecieron en la caverna en la provincia de Chiang Rai el 23 de junio, parecía acercarse al final cuando un equipo de submarinistas británicos y tailandeses les hallaron el lunes, en una pequeño banco de una de las cámaras anegadas.
Sin embargo, la atención ha pasado ahora a cómo traerlos de vuelta a través de varios kilómetros de túneles peligrosamente inundados. La Marina tailandesa se refirió a la posibilidad de que los 13 puedan quedarse dentro de la cueva de Tham Luang, en la provincia de Chiang Rai, hasta que el nivel de las aguas baje, cuando concluya la temporada de lluvias dentro de cuatro meses.
No obstante, otros dijeron que podrían estar fuera en pocos días si el clima les acompaña y el agua puede ser bombeada del complejo de cuevas, y si se les puede enseñar a usar equipos de buceo. Kobchai Boonarana, subdirector general del Departamento de Prevención y Mitigación de Desastres, dijo que depende del equipo de rescate en la cueva decidir cuándo estarán lo suficientemente fuertes para emprender el viaje de salida.
Algunos familiares de los chicos se reunieron cerca de la cueva el jueves temprano. Una madre dijo que no había podido contactar aún a su hijo. Los socorristas han enviado dentro comida, agua y personal médico mientras bombean agua de los túneles en un intento por bajar el nivel de las aguas y facilitar el rescate. Sin embargo, el departamento meteorológico advirtió el jueves que hasta un 60 por ciento del norte del país, incluido Chiang Rai, podría sufrir fuertes lluvias entre el 7 y el 12 de julio.