Entre las comunidades altoandinas más afectadas por las heladas en el sur del Perú se encuentra San Antonio de Esquilache, a 4700 metros sobre el nivel del mar y más de una hora de recorrido desde la ciudad de Puno.
La población de San Antonio de Esquilache se dedica a la ganadería; sin embargo, las bajas temperaturas afectan a los animales, de quienes solo se pueden rescatar los cueros pues su carne se vuelve insalubre.
La falta de agua es otro problema. Andrea, una vecina de la comunidad, debe caminar más de diez cuadras para acceder a un poco. En tanto, los niños padecen problemas de alimentación mientras caminan horas para llegar a su centro de estudios.
Un equipo de Latina Noticias continuará recorriendo más comunidades afectadas por las heladas.