Punto Final presenta en exclusiva audios de la reunión en la que se habría intentado utilizar a 34 fiscales para apagar la incontenible crisis del Ministerio Público.
“Ahora llevo la mayor parte del tiempo defendiéndome en los medios de prensa, llaman los congresistas. Mañana tengo que ir al Congreso por un tema, el miércoles por otro, he tenido que suspender mi viaje a México porque quería estar con ustedes, tengo que cumplir también con el Congreso de la República. No tengo miedo a nada”, explica el Fiscal de la Nación a 34 presidentes de las juntas fiscales del país el último 3 de setiembre por la mañana.
Ese día, en el piso 11 del edificio central de la Fiscalía funciona la Escuela del Ministerio Público. Aquel día se realizó allí el llamado “Encuentro Nacional: Política institucional para la función fiscal”.
Fuentes consultadas para este reportaje confirmaron que la reunión a la que acudieron los 34 presidentes de las juntas de fiscales del país habría buscado únicamente blindar al fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, con un documento que luego se haría público, que llevaría sus firmas pero que, para su mala suerte, nunca se concretó.
Para entender esta reunión hay un dato clave y es que aquel día el fiscal de la Nación estuvo acompañado de Víctor Rodríguez Monteza y Tomás Aladino Gálvez Villegas, dos de los cinco fiscales supremos del país y que Chávarry también integra. Los dos restantes, y que no estuvieron aquel día, son el exfiscal de la Nación Pablo Sánchez y Zoraida Ávalos. La razón de sus ausencias es un misterio, aunque desde julio parece haber una irreconciliable división en el más alto nivel del escalafón del Ministerio Público.
“La última denuncia que han hecho en mi contra es que yo pertenezco a una organización criminal ‘Los Cuellos Blancos’. Es una imputación muy seria pero también muy alegre de parte de personas que ya en su momento van a tener su lugar”, afirmó Chávarry frente a los fiscales.
En su alocución, el fiscal Chávarry critica sin miedo un dardo que días antes le propinara desde su propia institución el informe de la fiscal de Crimen Organizado Sandra Castro que lo incluye como miembro de la banda ‘Los Cuellos Blancos del Puerto’, dedicada a traficar influencias, recibir dinero de sobornos y cuya intención era llenar de corrupción el Poder Judicial y el Ministerio Público.
Visiblemente consternado, el fiscal se refiere entonces a un reportaje periodístico que cuestionó la labor del exfiscal del equipo especial que ve el caso Lavajato, Hamilton Castro. Lo hace a pesar de que poco después, su propio órgano de control desmentiría la perdida de evidencias de allanamientos de ese grupo fiscal.
“Se han perdido pruebas, yo ya le he dicho al doctor Germaná, de Control Interno, que haga las averiguaciones del caso para determinar la responsabilidad de quienes habrían intervenido en eso, pero parece que no les gusta que uno ejecute, que uno investigue, que uno encuentre responsables”, expresó Chavarry durante la reunión.